Un año más han
concluido los cultos en honor del Señor de la Salud que se han venido
desarrollando durante la primera parte de la Cuaresma. Como siempre, comenzaron
con el Vía-Crucis presidido por el Señor, que con toda solemnidad discurrió por
las calles del centro de Cáceres hasta los monasterios de hermanas clarisas de
San Pablo y Santa Clara con gran afluencia de hermanos y de fieles,
sobrepasando el centenar de personas que siguieron este culto. Una a una se
fueron rezando las estaciones del Vía-Crucis escrito para el Señor por el
Obispo don Francisco Cerro, alternándose con los cantos de la Coral In-Pulso
entre una nube de incienso y la penumbra de la ciudad monumental, mientras el
pasito del Señor iba caminando precedido por el cuerpo de acólitos, hermanos
con hachetas y un buen número de monaguillos.
Para el Vía-Crucis el
Señor lució túnica color amatista, despojado de un hombro y parte del pecho y
con una caña en sus manos, ofreciendo una imagen que nunca antes se había visto
en la calle, con potencias de plata y cíngulo de oro entrefino que regaló un
grupo de costaleros. Floralmente fue exornado con distintas variedades de rosas
malvas, tulipanes morados, flor de cera erygium y helecho de cuero.
Durante el segundo fin
de semana de Cuaresma el Señor se presentó ante los fieles en devoto besamanos,
instalándose de nuevo en la capilla de san Vicente, una vez restaurado el
retablo. Se instaló un altar de besamanos compuesto por los cortinajes forrando
la capilla y el dosel de cultos para enmarcar al Señor, con los dos doseles
auxiliares en las esquinas haciendo chaflán, estrenando dos pequeñas columnas
doradas, disponiéndose en todo ello distintas zonas de puntos de luz a través
de la cera y las ánforas del paso de la Virgen con orquídeas moradas y erygium,
yendo también distintos centros con rosas “cool water”, iris morados, tulipanes…
El Señor lució para el
besamanos túnica burdeos brocada en plata, con potencias y cordón igualmente en
plata, así como un cuello rizado realizado con un encaje de Bruselas punto de
aguja del s. XIX, cerrado con su amatista. Intenso besamanos por el que se
estima que pasaron más de 900 fieles, valorando muy positivamente la afluencia
de fieles que cada año va a más.
El sábado de besamanos
se presentó el cartel anunciador de nuestra procesión del Lunes Santo, obra del
pintor Daniel Jiménez Díaz, causando una gran aceptación; mientras que el
domingo recibimos a un numeroso grupo de cofrades salmantinos con el presidente
de la Junta de Cofradías a la cabeza que estaban en Cáceres para presentar su
Semana Santa.
Tras el besamanos, y
como culmen de los cultos se celebró el Solemne y anual Quinario en honor del
Señor de la Salud, para lo cual se trasladó hasta el presbiterio montándose un
retablo de culto que dentro del estilo propio de la Hermandad se ha dispuesto
con más número de cirios, algo más de cuarenta en total, así como se ha
sustituido los dos doseles auxiliares por sendos doseles presididos por cuadros
de San Francisco y Santa Clara enmarcados en paniculata blanca, del mismo modo
que se estrenaron dos ánforas con flores de talco flanqueando la cruz de altar.
Todos los días comenzaron los cultos con el rezo del Ejercicio de las Cinco
Llagas de Nuestro Padre Jesús de la Salud, salvo el jueves que hubo adoración
Eucarística y el viernes piadoso Vía-Crucis. Para el Quinario el Señor lució túnica
de terciopelo morada con cíngulo y potencias en plata con encaje de Bruselas
del siglo XIX al cuello.
El mismo viernes, tras
la Eucaristía se celebró el tradicional concierto solidario de marchas
procesionales, que corrió a cargo de la banda de CC.TT. Jesús Nazareno de
Trujillo, la Agrupación Musical Ntra. Sra. de la Misericordia y nuestra
Agrupación Musical Ntro. Padre Jesús de la Salud, teniendo el cariz solidario
porque se recaudaron alimentos para la Casa Familiar de la Cruz Blanca. Durante
el mismo, se interpretó por primera vez por parte de nuestra Agrupación la
marcha “Padre Nuestro de la Salud” ante el Señor y se estrenó igualmente la marcha
“Gabatta”, bellísima composición de N/H Raúl Martín Cruzado. Durante el acto también
se presentaron los proyectos de túnica bordada y nuevas potencias para el Señor
de la Salud, obras de Álvaro Abril Vela.
El domingo, 4 de marzo,
concluyeron los cultos con la Función Principal de Instituto de la Hermandad,
presidida por fray José María Morán, ofm, sirviendo de acólitos los propios de
la Hermandad, estando ilustrada musicalmente por la Coral In-Pulso. Durante la
Función se impusieron la medalla y juraron reglas 18 nuevos hermanos.